sábado, 14 de mayo de 2011

Positivismo y bienestar

Hacía un sol esplendoroso, olía a flores frescas y la gente paseaba sonriendo a todo aquel que a su lado pasaba. Todos eran felices.

No sé si será por mi estado de ánimo, u hoy todo está bien. Aunque tenga que estudiar estoy motivado porque mi alrrededor está positivo.

Quería escribir esta entrada para hablar sobre cómo somos capaces de tergiversar las cosas solo por nuestro estado de ánimo. Como un día estupendo de sol se puede convertir en una mierda de día de calor agobiante solo porque nuestro estado de ánimo sea pesimista, porque estemos un poco depresivos o porque algo no nos haya salido bien. Digo que algo no nos haya salido bien porque somos muy capaces de generalizar sobre el futuro y sobre nuestro destino del que tantas veces hablamos a lo largo del día; Somos capaces de por haber tirado la taza de café a primera hora de la mañana decir “Vaya día que llevo hoy, hoy va a ser un día de fatal”. Desde ese momento en nuestro sistema límbico (área cerebral encargada de las emociones) se producen una serie de impulsos que provocan la liberación de hormonas que serán depresoras de nuestro sistema nervioso y comienza el “día de mierda”.

Ahora es relativamente tarde para cambiar nuestro día, ya que las hormonas tienen una acción relativamente lenta y pasará un tiempo en el cual sigan ejerciendo su función depresora, una vez liberadas… toca esperar aunque sea un tiempo para cambiar la conducta.

Ahora también, esto es como lo de la gallina y el huevo: ¿Estoy feliz porque salen las cosas bien o salen las cosas bien porque estoy feliz? Yo estoy con que las cosas salen bien porque uno está feliz y a su vez, como están saliendo bien, éstas aumentan la felicidad de uno. Llegando así un día en el que te encuentras feliz, y que además todo te sale tal como lo habías planeado, a un éxtasis similar al de Sta. Teresa en su poesía.

Cuando nos levantamos positivos, como me pasa a mi hoy, es porque nuestra vida va bien, porque últimamente han pasado algunos sucesos que realmente nos han animado la existencia, sean personas, sean hechos… Os digo que hoy me apetece salir a la calle, me apetece ver a la gente, me apetece estudiar para poder seguir adelante con la carrera e intentar aprobar los exámenes. Doy gracias a los hechos y a las personas por ayudarme a conseguir mi felicidad.

Además dicen las malas lenguas, que la gente con un mayor estado de felicidad contínuo vive más y mejor. Tienen menos posibilidad de padecer cáncer y enfermedades cardiacas.

¿A vosotros os pasa lo mismo? ¿Cuándo estáis positivos todo os va mejor y al contrario cuando estáis negativos?

Un abrazo

5 comentarios:

  1. Así es G.s! Es como yo digo que por la mañana debemos mirar todo con ojos optimistas, porque si miras con ojos pesimistas nada sale bien.

    Besos mi niño!
    Flor

    ResponderEliminar
  2. Totalmente de acuerdo. Yo me suelo levantar cantando una canción que se titula "Un día redondo". Luego siempre se puede tender a la baja, pero hay que salir con altas expectativas jeje.
    Un besazo y gracias por pasar!

    ResponderEliminar
  3. Es una lástima, pero por lo general la gente renuncia con demasiada facilidad a la felicidad.

    Yo tengo muy claro a qué no renunciar, y mientras pueda mantendré mi fase hipermaníaca (hasta ahora no descrita ni en la CIE-10 ni en el DSM-IV, a ver si en el DSM-V la describen. Es una fase maníaca a lo bestia. Sí, más aún xD)

    Viva la hipermanía!!!

    ResponderEliminar
  4. Jajaajajaa
    Eres tonto... me has hecho buscar todas las siglas en GOOGLE xD
    No renuncies nunca a la felicidad y continúa con los proyectos del blog, que son super interesantes!

    ResponderEliminar
  5. Jajajajajajajaja!!!!

    Ya te veo como loco buscando siglas xDD

    Es que me dan venazos frikis, ya me conoces ;)

    ResponderEliminar

¿Tu también eres inocente?