lunes, 9 de mayo de 2011

Qué bonito es vivir en la ignorancia

A lo largo de mi vida he contemplado como las personas somos más felices cuando no conocemos. Por un lado tenemos esa inquietud viva de conocer, que se elimina cuando por fin entendemos un funcionamiento, una situación o cualquier otra cosa, y por otro lado tenemos el placer de la ignorancia.
Si observáis a vuestro alrrededor veréis como los niños pequeños son tremendamente felices con tan solo saciar sus instintos de supervivencia, los llamados instintos primarios. Y ya está, no se preocupan de más cosas; no conocen cual es el mecanismo de fabricación de una balaustrada de granito ni conocen como funciona el Partido Popular en Villanueva de los Infantes. Y aún así son felices, me reitero.
Con esta deducción observamos como el conocer, en el que tanto empeño ponemos y en el que tanto tiempo gastamos nos lleva a las preocupaciones más variopintas.
Desde que conocemos los mecanismos de enfermedad y sanación (o paliación, mejor dicho) nuestra preocupación más primaria es la de sobrevivir (aunque sea en este mundo de locos). Si tenemos un pequeño resfriado como sabemos a qué nivel actúa el patógeno que lo produce lo atacamos con medicamentos, teniendo que preocuparnos de tomar los antibióticos periódicamente para así poder sanar y continuar con el buen estado de salud. Antes un resfriado se trataba (aunque con peores resultados, supongo) con unas hierbas "medicinales" y unas bebidas cuanto menos curiosas con productos que nos daba la naturaleza como eran la miel, el limón, el romero y otros muchos que aún en zonas menos desarrolladas que en la que vivimos siguen empleando. La preocupación no se basaba en cual será el antibiótico más adecuado para tal o cual paciente, se utilizaba menos tiempo en hacer estudios clínicos y se empleaba el mismo en cuidar de la familia (lo que aumentaba la salud mental del grupo al sentirse tremendamente acogidos y acompañados en la vida y lo que a su vez, de una forma secundaria a través de la mejora del estado de ánimo, previene enfermedades como pueden ser el cáncer). Porque sí, no sé si lo sabíais, pero está demostrado que personas sometidas a un mayor nivel de estrés tienen más posibilidad de padecer algunos tipos de cáncer (creo recordar que un ejemplo es el de colon).

Y hablando de ignorancia, de conocimiento y de agobios también quiero referir lo bien que nos sentimos cuando somos autócratas. Cuando no hay nadie que nos mangonea nuestros fondos económicos ni nuestros bienes más preciados. Está claro que es necesario que haya una política, y está claro que, como en "La República" de Platón, debemos confiar en un gobierno limpio y no corrupto. Os aconsejo que en términos políticos viváis en la ignorancia, pues da pene comenzar a conocer este mundo y darse cuenta de la cantidad de problemas que se evitarían de una forma fácil y que por egocéntricos e interesados no hacemos más que acrecentar.

¿Sabéis cuantas familias de clase media podrían comer con el sueldo de la señora de Cospedal (Candidata por el PP a las autonómicas de CLM)? Pues 12.
Desconozco los demás datos, pero hay algún correo que circula por ahí, no se con qué verosimilitud, que al leerlo me dejó fascinado. Estoy seguro que este país podría salir de la tan famosa "crisis" si todos los políticos fuesen mileuristas, si las becas se dieran a la gente que de verdad las necesita y no se entregaran bajo cuerda y por intereses personales, amorosos, o a cambio de sexo.

Esto que os relato en un par de parrafitos estoy seguro que lo habéis pensado en más de una ocasión, pero quería narrarlo para que veáis lo bien que se vive en la ignorancia. Lo bien que se vive sin saber que todo esto está ocurriendo. Tu eres un ciudadano medio, vas al trabajo, cobras, pagas tus impuestos y tus alimentos, sobrevives, tienes buenas relaciones con tus amigos y con tu familia, no tienes ningún problema con nadie... para qué preocuparte de lo que pasa alrrededor si no te afecta "directamente"?

Hay otra situación que también me hace mucha gracia, y es esa en la que un "amigo" te dice lo que otra persona ha dicho de tí. Pongo lo de "amigo" porque se suelen decir las cosas malas, las críticas que no tienen demasiado de constructivas, y las cosas que con su conocimiento solo nos llevan a la desconfianza y a los malos entendidos. "Me ha dicho mi amigo que ha oído que tú has dicho de mí..." En fin, prefiero vivir en la ignorancia de lo que la gente piensa de mí, si tienen algo que decir que lo digan a la cara. Es por eso que yo tampoco comento nada de nadie a modo de chismorreo, pues no me gustaría que uno de estos correveydiles trasladase nuestra tan privada conversación en confianza al sujeto de análisis y cuando digo análisis quiero decir al sujeto criticado y puesto de vuelta y media (como dicen en mi pueblo).

¿No pensáis que somos más felices cuando somos ignorantes?
Desde que sabemos que el cáncer mata, cuando diagnostican un cáncer todo el mundo se echa a temblar. Antes sabíamos que la gente había muerto por algo, pero no sabíamos la causa concreta.
¿Nos merece la pena saber que tenemos una leucemia si no hay nada que hacer al respecto? Igual prefiero no saber nada y un día pasar a mejor vida.



A reflexionar, si os apetece.

7 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Enhorabuena por esta entrada. Me ha gustado, y me ha hecho reflexionar y pensar (que son las dos cosas que más valoro en mí).
    Un saludo!

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  3. Gracias por pasar ;)
    Me alegro que te haya servido.

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  4. En muchas cosas estoy de acuerdo pero, tampoco es muy bueno vivir en la ignorancia, ¿no?

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  5. No somos igual de felices cuando ignoramso cosas que nos gustaría conocer. Al respecto he de decir que la generalización de ignorancia = bonito deja muchos cabos sueltos. Solo quería resaltar las muchas cosas que conocemos y de las cuales podríamos prescindir, ya que no nos son para nada productivas; También así demostrar que somos muy ignorantes en las cosas que realmente deberíamos conocer.
    También podrías plantearme: ¿Tú por qué estudias medicina si crees que la ignorancia ante una enfermedad sin cura es mejor que el conocimiento? Pues no lo sé...

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  6. yo tengo esa respuesta que quizá tu formulas y que verdaderamente conoces,pero como eres una persona humilde ante todo dejas que otros lo digan por ti!
    porque el verdadero sentido en las personas no es lo que uno se cree de si mismo o deja de creer sino lo que sus actos dicen de el a traves del corazón de sus amigos y de cada una de las personas que crucen a lo largo de tu vida.
    aprendiste muy bien que en esta vida estamos de paso y que nuestra unica mision es ayudar a nuestro projimo y por eso cada uno lo hacemos utilizando los dones que dios nos dá,y a tí te ha dado la capacidad de formarte para servir y ayudar,nosotros tus padres somos las personas que desde el primer momento de tu existencia creemos en tí ,un beso cariño.
    no cambies nunca............te queremos.
    tus papis.

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  7. En absoluto se vive mejor siendo ignorante. Depende del tipo de conocimiento el que así sea o no, pero no de conocer ciertas cosas o dejarlas de conocer. Si te deprime saber sobre política, por ejemplo, no debes buscar la ignorancia para volver a ser feliz, sino que ya eres muy ignorante, pues deberías tener capacidad suficiente para deducir que el sistema político que tenemos se debe a la ignorancia del pueblo y sus dirigentes; los primeros por mirar hacia otro lado dándoles libertad a los segundos, y los segundos por no darse cuenta de que su forma de vida no los hace más felices, ya que del dinero no depende la felicidad como así dicta la versión vigente del sistema capitalista, y por, además, no entender que el reconocimiento social fruto de obrar bien es tremendamente placentero, ¿o acaso no buscamos todos aceptación social desde la más tierna infancia? El conocimiento, si nos hace vivir mal, si nos causa ignorancia, es porque somos ignorantes en otros aspectos. Abrazar la ignorancia es la salvación de los débiles y los cobardes; el niño vive bien siendo ignorante porque lo mantienen, de manera que es otro el que posee el conocimiento para mantenerlo con vida. El conocimiento es la salvación, pero se debe conocer con profundidad para no caer en la perdición del que ignora lo que debería saber y conoce lo que no entiende.

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¿Tu también eres inocente?